EL VALLE DEL SILENCIO

RÍO OZA

A pocos kilómetros de Ponferrada (León), está el Valle del Silencio, un lugar donde el tiempo se detiene y el ruido se desvanece, solo el murmullo del río Oza se escucha. Un valle único, un lugar donde los monjes visigóticos decidieron poblar con ermitas y cenobios, sabiendo que allí  encontrarían la paz espiritual. Los Montes Aquilianos, así se llaman estos montes, de sus  ríos, los romanos se proveían de agua para extraer el oro de las Médulas.

Para llegar hasta el Valle del Silencio, hemos de llegar a Ponferrada y desde allí tomar la carretera hacia Peñalba de Santiago, esta es una parcheada  y muy empinada carretera de esas con encanto, que atraviesa un terreno plagado de árboles, el río Oza y sus cascadas nos acompañan. 

La carretera termina en Peñalba de Santiago, es un pueblo de montaña totalmente remodelado, mantiene su encanto por sus calles estrechas, sus techos de pizarra, su iglesia mozárabe del 937 y por la ausencia de coches, pues el coche hay que dejarlo en un parking a la entrada.

CAMPANARIO PEÑALBA DE SANTIAGO

SANTIAGO DE PEÑALBA ( MOZÁRABE)

         

Desde aquí  parte una ruta de unos 14 km, que nos permite conocer en profundidad el Valle del Silencio, pero nosotros no tenemos tiempo para hacer esa ruta, además llueve y nos acercamos a la CUEVA DE SAN GENADIO, el camino que parte del pueblo es de poca dificultad, está bien señalizado y es fácil caminar por el, a pesar de algunas cuestas. En media hora, si no te paras mucho para disfrutar del paisaje y cargar la cámara de fotos (algo imposible con el espectacular paisaje), puedes llegar a la cueva.

Desde la cueva que está abierta todo el año tenemos las mejores vistas del valle y de Peñalba.

        

 Tras este paseo un bocata y vuelta a la carretera, hemos de parar en Montes de Valdueza a contemplar las ruinas del Monasterio de San Pedro de los Montes.

El lugar elegido para alojarnos: LA POSADA EL AMANECER, en Espinoso de Compludo, un lugar con un encanto especial.
Al día siguiente nos desplazamos a conocer la HERRERÍA DE COMPLUDO, (declarada monumento nacional en 1968) situada en Compludo, justo a la entrada del pueblo, un camino paralelo al río nos acerca hasta allí. Esta herrería data su origen en el siglo XIX, lo que hace especial esta herrería es el aprovechamiento del agua por medio de un sistema muy rudimentario, destinado a la creación de forja.

 Este valle, es un paraje digno de ser visitado, un paisaje espectacular, a la par que mágico y enigmático.

No hay que perderse:
Peñalba de Santiago
Cueva de S. Genadio
Ruinas del monasterio en Montes de Valdueza
Herrería de Compludo